¡Venga usted a mi tertulia!
UN MANUAL DE REVOLUCIÓN SOCIAL
ENGAÑADOS COMO CHINOS (perdón a los chinos)
Cuando hago cálculos sobre lo que son 1,50 euros convertidos en pesetas actualizadas a día de hoy, es decir, sumándole la inflación desde el año 1.999, fecha de entrada del euro, es cuando me viene esa crisis vital de que me están engañando, de que nos están engañando, de que somos verdaderamente IDIOTAS.
Todos sabemos que con la llegada del euro, los artículos subieron un 66,386%. Un periódico pasó de valer 100 pesetas a 1 euro (166,386 pesetas) en MENOS de un año. Todos nos callamos. Ya no era un robo por parte del quiosquero, ya que a él también se lo facturaban en euros y su ganancia siguía siendo la misma con el euro que sobre las 100 pesetas.
El que nos dijeran, sin ningún rubor, sin ninguna vergüenza, de que la inflación del año 1.999 fue de 2,9%, ya demuestra como nos tienen catalogados. Yo hubiera pedido de que, al menos, hubieran disimulado un poco. ¿No hubiera sido mejor, más humano, el que nos hubieran dicho que, debido al anclaje de una única moneda entre varios países europeos que habían decidido convivir estrechamente entre ellos, la inflación se había elevado ligeramente hasta un 6 ó 6,3%, aunque fuera mentira? Pero no lo hicieron, todo el mundo se calló ante esa gran mentira QUE SABÍAMOS QUE ERA LA GRAN MENTIRA.
Ahora solo nos queda fastidiarnos, sufrir los sueldos con una pérdida del 63,486%, (66,386-2,9%) y quedarnos callados.
Siempre tenemos abierta esa sempiterna puerta que nos deja este modélico sistema económico liberal que tanto bien ha hecho por la Humanidad: no ir a tomar el café a 1,50 euros. Nadie nos obliga a ir. Pero… ¿qué sería de nosotros si no gastamos, si no nos hipotecamos, si no compramos de todo?
¿Me puede decir alguien CUÁNTO cobraba un auxiliar administrativo en 1.998 y cuanto cobra ahora este mismo trabajador? ¿Sabe alguien cuanto cobra un nuevo trabajador en ese mismo puesto?
¿Cuánto costaba el pan, la leche, el tabaco, la gasolina, un piso de protección oficial de 90 m2, el cine, el periódico, la luz, el butano, unos Levi´s, el tomate Solís, el agua Fontvella, una caja de aspirinas Bayern en 1.999 y cuanto cuesta actualmente?
Lo peor de todo es que NOS ES IGUAL. Seguimos votando a los mismos partidos, seguimos sin querer leer, seguimos haciendo lo mismo año tras año. Los que sabemos hacer, al menos, la "O con un canuto" somos los peores, nosotros si que tenemos "los gobiernos que nos merecemos".
¿Seguiremos siempre así?
No es obligatorio que me contesten. Yo ya tengo decidido exiliarme, solo me falta elegir un lejano país.
We love Donald Trump
NO ES LO MISMO (como decía la canción)
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El ministro de Justicia de aquella étapa, López Aguilar, con su imposibilidad a sintetizar sus declaraciones y a chorrear infinitamente sobre cualquier tema nimio, unido a su miedo a enemistarse con algún grupo sociológico de sus electores, complicó en sobremanera este caso. Un tema de amenazas hechas por este ex-etarra, hace que éste siga en la cárcel a pesar de que tenía que ser puesto en libertad. Se fuerza la Ley para retenerlo en prisión por miedo al “que dirán”. Este “que dirán” empieza a complicar todo. Hay un punto de inflexión y , a partir de ahora, cualquier victima es un referente. El discurso de que una victima no puede ser juez, parece trasnochado, el introducir todos los delitos en el mismo saco ahora es normal. Si cuestionas que los violadores, pederastas y psicópatas son enfermos mentales y no deberían estar en prisiones, sino en sanatorios, te pueden llevar a que te miren mal. El comprobar que se sigue retorciendo este tema, diciendo que la castración química es un salida a violadores y pederastas, hace que no se ponga colorado nadie, a pesar que no es una salida permanente y que sólo puede ser una parte de la solución. Si solicitas que haya sanatorios-prisión para este tipo de enfermos mentales, en vez de prisiones, se te vuelve a mirar mal o ya ni se te escucha. Ya no digamos si intentas diferenciar las causas que ha llevado a un pederasta a cometer un delito o a un traficante de armas (placer vs dinero). Se busca la reflexión más fácil y se dice que todo es lo mismo.
Yo, café; yo, también.
Lo juro por dios
La madre de Ana Rosa
EL SÍNDROME PALLIN (Sara)
Estoy del 15-M hasta los huevos, con perdón
ESCLAVAS ON THE ROAD
Siento vergüenza cuando voy con mis hijos en coche y veo a jóvenes y preciosas mujeres queriendo cambiar la introducción de un pene en su boca, vagina o ano, por dinero (no he puesto “ofrecer su cuerpo” porque me parece un eufemismo no muy esclarecedor y hasta un poco hortera). Cada vez que veo alguna, me tensiono esperando que uno de mis hijos me pregunte que hacen esas chicas a ambos lados de la carretera y, contestada su pregunta, me vuelvan a preguntar el por qué permitimos eso. Todavía no he llegado a tener una buena respuesta.
No recuerdo donde leí que la prostitución de los años 40, 50 y 60 era consecuencia de la miseria que acampaba por territorio hispano; que la de los años 70 y 80 era debida al consumo de las drogas y que, la de los años 90 y primera década de este siglo, está siendo debido a la simple esclavitud.
Sobre este tema, la prostitución, también hay un debate sobre su posible legalización o no. Una parte sostiene que sería lo mejor para que de esta manera las prostitutas y sus clientes estuvieran más protegidos sanitariamente y que, también, estas, incomprensiblemente llamadas “trabajadoras del amor” (sic), tengan su seguridad social e, incluso, contribuyan al sostenimiento del Estado del Bienestar –que las margina y olvida que son esclavas- con los impuestos de su “actividad económica”.
Otra posición sostiene que, legalizarla, no las beneficiaría, sino que legalizaría, obviamente, su marginalidad y esclavitud. La anterior posición, a la que me he referido en el párrafo anterior, parte del antiguo discurso de que las prostitutas son jóvenes, en su mayoría del sur de España, que nutren las calles de viejos barrios de las grandes y medias ciudades. Esto ya no es así. Ahora las jóvenes ya no son de nuestro Sur, sino del otro gran Sur y también del Este de Europa. Ya no son jóvenes andaluzas, extremeñas o gallegas aparcadas en bares y tabernas de mala muerte y controladas/protegidas por un novio sinvergüenza urbanita. Ahora son estructuras mafiosas del África subsahariana y de la Europa del Este que exportan, asientan, controlan, alquilan, venden a estás foráneas jóvenes. La chica de pueblo que venía a la ciudad a trabajar de sirvienta y que era engañada por su novio para ejercer la prostitución, ha acabado hace muchos años. Ahora hasta existe el sistema “vending”, que consiste en dejar a prostitutas en los cruces de carretera a las 6 de la mañana e ir a recogerlas a las 9 de la noche, tal como si fueran una maquina de dispensar refrescos, cafés o bollería.
En esta época de renacentista profesionalización, la modernidad también ha llegado a la prostitución e, incluso, existe una organización empresarial de clubes de alterne que juega como poder fáctico, tal como si fuera otro tentáculo de la CEOE.
Dicen que ni la propia Iglesia española, vasca y catalana, salida de la Gloriosa Cruzada, pudo acabar con las mujeres de mala vida que fumaban y te trataban de tú sin apenas conocerte. Ni el gran Estado Nacional Sindicalista, adalid de la gran Revolución Pendiente que nos iba a librar del Liberalismo y del Marxismo, pudo hacerlo. Parece ser que se dejó hacer, ya que valía más contentar a los hombres de aquella época con el placer carnal, que meter a las miserables prostitutas en campos de trabajo o de reeducación nacional.
Esta eterna tolerancia hacia la prostitución se veía empañada con algunas redadas hacia ellas, e incluso, hacía los protectores/novios que asesoraban y disfrutaban de las jóvenes miserables que eran engatusadas por ellos mismo de mil y dos maneras.
Todo esto llevó también a que con la “Reforma” de Los Principios Fundamentales del Movimiento que enmarcaban aquella, añorada por algunos y más de algunos, Democracia Orgánica, no se cuestionara este tema. Se pensaba que la Libertad que se avecinaba acabaría lánguidamente con ella, con la prostitución, y ya no harían falta putas. Los españoles ya no necesitarían comprar esa masturbación extracorpórea.
Los hechos, el tiempo, la realidad, parece demostrarnos que no fue así, pero parecía que sí, ya que la desaparición de algunos barrios, de esas noveladas estrechas calles, llenas de bares y pensiones, con mujeres sinuosas y viandantes sin prisa, nos lo estaba corroborando.
Después de esos primeros años de prehomologación con nuestros vecinos europeos, en los que gozosamente nos inundamos de revistas, películas administrativamente llamadas “eróticas”, que acabaron lógicamente en lo verdaderamente esperado: pornografía dura y pura, la cosa cambió por exceso, ya no se iba a ver striptease, este tipo de salas desaparecieron; la gente quedó saturada por ese curso acelerado de cuerpos, consultas de sexólogos, de cine con películas sin ton ni son… Lo curioso es que a la par que nos volvíamos tan europeos, tan libres, tan liberales, la Fiesta Nacional y el fútbol decaía, las folklóricas desaparecían y el deporte rey era ahora el baloncesto. Ya éramos casi como los suecos, los noruegos, los holandeses… Las prostitutas estaban ahora en salas de masaje y en clubes, establecimientos escasos en número que eran sólo visitados por gente mayor. La población menor de 60 años ya no requería esos servicios.
Años después, no hace tantos, unos 10/15 años, la cosa empieza a cambiar, hay otra prematura pero -esta si que es- real homologación con nuestros vecinos europeos –los occidentales, claro-: Llega la inmigración. Con ella llegan exuberantes jóvenes de Nigeria, Cabo Verde, Colombia, Bulgaria, Rusia, Ucrania, Rumania… El español parece estar cansado del sexo patrio y se vuelca en este tipo de prostitución no nacional. Aparecen prostíbulos con, ya no decenas de prostitutas, sino con centenares, donde uno puede elegir a la joven que quiera. Los periódicos se llenan de anuncios de prostíbulos y/o prostitutas, hasta algunos clubes de fútbol de barrio son patrocinados por prostíbulos, incluso se anuncian por la radio. Las despedidas de soltero ya no se celebran en discotecas y en pubs, sino en cabarets llenos de bailarinas/prostitutas. Vuelve, incomprensiblemente, el “striptease”. Ahora se hace sobre una barra, la misma estética que veíamos en películas americanas de los años 80 y que, con nuestro secular antiamericanismo, despreciábamos al observar a los americanos asistiendo a ese tipo de cabaret donde una chica se desnudaba mientras ellos se tomaban una cerveza. Lo achacábamos a su origen cuáquero.
A algunos sentimos el corazón a consecuencia de que nuestros ojos ven. Antes no se veía y no sufríamos. Ahora ya conviven con nosotros, incluso en nuestros edificios habitan algunas casas de masajes o empresas de modelos, no eufemísticamente, llamados casas de putas.
Veo en los ojos de mis hijos un claro reproche de que mi generación, los que tenemos entre 40 y 55 años, la generación que está gobernando, la generación que bajó de la Sierra Maestra Virtual, la que luchó en las calles del París Virtual, la que estudiaba en el Berkeley Virtual y tiraba piedras a la policía yankee, permita y, sobre todo, TOLERE, la esclavitud.
Hoy en día, en Suecia, lugar de donde decían venían unas rubias espectaculares muy libres ellas y muy liberales, se han tomado en serio esto de acabar con la prostitución. Ahora ya no se perseguirá a las prostitutas sino que se hará a LOS CLIENTES, a esos mismos seres sin escrúpulos, a esos mismos seres sin principios que se aprovechan de chicas que son esclavizadas. Aquí ya no hay un aprovechamiento de una chica venida de la miseria, sino de un aprovechamiento de una chica esclavizada. Hay que acabar con esto y los suecos han empezado, POR FIN, por el sitio que era intocable y que nunca se intentó penalizar: EL CLIENTE.
Desconozco, por falta de información, si esta fórmula también está enfocada simultáneamente hacia el esclavista, el secuestrador, pero me gustaría que fuera así.
Otra parte que debería ser perseguida con igual ahínco es el empresario de locales de alterne, el mismo personaje que manifiesta sin ponerse colorado que solamente es otro factor en el negocio, el más pequeño: él sólo pone el local. Parece que están muy interesados en que se legalice este tipo de esclavitud, que se blanqueé todo el dinero que crea este negocio esclavista, en que las esclavas puedan y lo necesiten cobrar el paro, el que tengan Seguridad Social y todo lo demás. Está visto que son un ejemplo del empresariado patrio altruista.
José Bono, ex-Presidente de la Junta de Castilla-León, manifestó en una ocasión, que él era partidario que las fotografías de los maltratadotes de género fueran publicadas en periódicos y vallas publicitarias en lugares públicos. Yo extendería esta gran idea a los CLIENTES detenidos por contribuir a la esclavitud, la prostitución.
¿No será que nuestro ensimismamiento patrio, nuestra hasta hace poco oculta xenofobia, nuestro etnocentrismo, nuestra actual posición de “nuevos ricos”, nos hace mirar hacia otro lado porque son chicas esclavizadas no españolas?
Alguna razón habrá en nuestras mentes para que podamos vivir sabiendo que en nuestra sociedad todavía existe la esclavitud.
CATÓLICOS PRACTICANTES
Recuerdo que un profesor nos preguntó si éramos católicos. Todos, y sin ningún tipo de dudas en nuestra mente, habíamos contestábamos afirmativamente. Tan pronto como oyó la respuesta, en su cara apareció una sonrisa de autosuficiencia y nos volvió a inquirir:
-¿Creéis que
Después de las risas de rigor ante semejante pregunta, nos quedamos callados sin saber que decir. Algunos se atrevieron a plantear que lo más seguro es que fuera embarazada por San José, pero con la intervención de Divina. Los demás no supimos que decir.
Siguió con otra pregunta:
-¿Creéis que cuando un sacerdote en
Empezamos soltarnos. La mayoría contestábamos que no, que era simplemente un ritual.
Sin alzar la voz, había continuado:
-¿Creéis que los Santos, son hombres celestiales y deben ser adorados como tales?
Aquí creo recordar que había habido un empate técnico en las respuestas afirmativas y negativas.
-¿Creéis que con limosnas, peregrinaciones, contribuciones a
Los votos negativos había sido mayoría.
-¿Sois partidarios de que se suprima el celibato y que los sacerdotes puedan formar una familia, es decir, puedan casarse y tener hijos?
La totalidad había contestado que sí. La mayoría alegaba que esto establecería una relación más humana con los feligreses.
Cuando nos preparábamos para seguir recibiendo alguna otra pregunta, más preocupados en que pasara la hora de la clase que por interés en el tema, el profesor nos anunció:
-Os informo que no sois católicos.
La incredulidad y, en algunos casos, la risa nerviosa, se reflejó en la cara de todos nosotros. Personalmente me sentí ateo y que iba a ir directamente al Infierno.
-Sois protestantes, sentenció.
Esto sonó peor. Pensé en decírselo urgentemente a mi madre y que me llevara de inmediato a que me volvieran a bautizar y repetir
Ahora, ya unos años después, recuerdo a menudo esta anécdota cuando en tertulias improvisadas con amigos, conocidos y menos conocidos, les preguntas si son o se consideran católicos. Automáticamente y sin ningún tipo de vergüenza te contestan: “bueno…, soy católico, pero no practicante”. Esta matización -“no practicante”- es la cuestión de mi desasosiego. Lo peor de esto es que sueltan esta respuesta matizada pensando que es producto de una profunda reflexión. Otros suelen decir: “no creo en
Sobrepasando la teoría de mi antiguo profesor, estos no son católicos, no son ni “católicos practicantes” ya que
FAUNA TERTULIANA
La radio se ha convertido en el lugar donde se asienta lo peor del periodismo español, con el desembarco de tertulianos que apoyan, tanto con acción como por omisión interesada, la ideología del conductor del programa o del dueño de la emisora.
El tertuliano de hoy en día, es un personaje de lo más curioso. Tal como pasa en
Políticos en activo: Desconozco la función de este tipo de tertuliano asiduo, que lo único que intenta es vender el programa o la posición de su partido. Entendería que se les invitara de forma ocasional para entrevistarle, no para que haga de portavoz diario de su partido.
Políticos en desuso (o desencantados): La mayoría tienen una posición de crítica feroz a todo lo que les rodea y, sobre todo, a lo que dejaron atrás. Los más significativos son Pablo Castellano, Cristina Alberdi y Ramón Tamames. Se les podría definir como: “odio todo lo anterior y todo lo posterior”. Quizás habría que incluir en este apartado a algún periodista como es Javier Nart. Este grupo tiene que incluir en algún momento del programa la frase “y lo digo yo, que soy de izquierdas, pero no de esta izquierda,…”
Periodistas “independientes”: Son un pequeño grupo que puede ir a cualquier programa y hablar de cualquier tema sin importarle el posicionamiento del programa o del conductor. No se enfrentan abiertamente a ellos sino que intentan dar una visión personal aunque sea haciendo malabarismos y juegos dialécticos para no quedar mal con el que le abona su colaboración. Un claro ejemplo es Fernando Jáuregui.
Periodistas extraterrestres: Este tipo de periodista solamente se da en Catalunya. Es capaz de criticar todo, a excepción de lo que ocurre en tierras catalana. Ante cualquier critica contra el Govern de turno, que salga desde la no-Catalunya, sale en su defensa automáticamente. La realidad sólo existe más allá del Ebro.
Periodistas bipolares: Tendría que incluir a este espécimen en el capítulo anterior. Cuando son invitados por algún medio catalán dicen una cosa, si el medio es de Madrid dicen otra o la matizan.
Periodistas de partido: Aquí se podría englobar a la mayoría de ellos. La independencia y la ética periodística que, parece ser, les habían inculcado en la facultad, brilla por su ausencia. Aquí se puede listar desde Carnicero a Isabel Sansebastian.
Periodistas masoquistas: Son los más odiados por un servidor. Asisten asiduamente a programas donde son, por la mayoría de los asistentes y por el propio conductor/director, masacrados. Ejemplo claro: Antonio Casado y Carlos Mendo.
Periodistas “chicle”: Depende de quien los contrate, se posicionan. Son de la ideología de su pagador.
No quiero dejar el tema de los tertulianos sin adentrarme en el mundo de los directores de programas. Aquí ya no se puede relacionar por su especie sino por su nombre propio:
-Iñaki Gabilondo: Hasta la segunda legislatura de Aznar era considerado una “monja”. Pasaba con demasiada facilidad de efectuar una ligera crítica a algún ministro aznarista, a hablar de la problemática del pingüino austral. El “Prestige” y la segunda guerra de Irak le hicieron salir de su “clausura”. Hasta él mismo confesó que Aznar le había roto los nervios.
-Luis del Olmo, el daliniano: Está por encima del bien y del mal. Su adscripción societaria al grupo del ABC, le “obliga” a no alinearse asiduamente con el PSOE cuando gobierna este partido en Madrid. Quizás es el único periodista que no ha olvidado totalmente las lecciones de la asignatura de Ética Periodística que se imparte en 3º de carrera.
-Carlos Herrera: Es como si lo hubieran puesto allí expresamente para hacer la oposición a Chaves, Presidente de Andalucía. Su alineamiento con el PP es descarado, aunque, a la hora de efectuar una entrevista a uno de sus “dianas” habituales (socialistas, independentistas, comunistas, nacionalistas, etc.) siempre las termina de “buen rollito”. En una de las efectuadas a Zapatero, le preguntó que tendría que hacer él en esta España si se consideraba español, de derechas, católico y heterosexual. Parece ser que se sentía perseguido por el “extremismo estalinista-maoísta” de presidente Zapatero. El objetivo empresarial de esta cadena radiofónia no es precisamente la captación de oyentes y, consecuentemente, maximizar el beneficio económico, que parece no importarles al ser perennemente la última cadena en radioyentes de las 4 "grandes".
-Jiménez Losantos: Cada vez que lo escucho tengo que ponerme en el papel de abogado del diablo. Personalmente creo que este señor padece algún tipo de enfermedad psicológica resultante del atentado que tuvo en Barcelona, al ser secuestrado y tiroteado en una pierna por miembros de Terra Lliure y haber mirado hacia otro lado toda la sociedad catalana. Su único “delito” fue oponerse a la aplicación de la ley de Normalización Lingüística catalana. Sus colaboradores y compañeros radiofónicos (Cesar Vidal,
Cuando uno escucha el programa de una emisora, espera oír varias posiciones intelectuales, de gente de presumible valía intelectual, para seguidamente, optar por la que él crea que es la posición más acertada o cercana a su ideología. Lo que está ocurriendo en la radio es que gente de no demostrada solvencia intelectual, se alinéa con la doctrina de la dirección de la cadena y dice lo que sus oyentes de parroquia quieren escuchar.
Al final son viejas ociosas hablando alrededor de una mesa camilla.
¿No sería mejor invitar y presentar a tertulianos que anteriormente hayan reflexionado y estudiado el tema a tratar, o es que se puede hablar de política terrorista, de política monetaria, de política exterior, etc., como si fuera una tertulia de futbol? Parece ser que sí.
Lo peor de todo es oír a algún tertuliano autodenominarse “creador de opinión”.
Siempre nos querará el exilio.
PERFECCIONAMIENTO PERFECTO
¿Qué se puede oponer a este sistema liberal-conservador?
A la vista de lo que se puede aprender viendo
Es un sistema político-social-económico con unas defensas perfectas. Todas las críticas a sus errores, fallos, paradojas, etc., son deglutidas de tal forma que provoca su propio perfeccionamiento, no para mejorarlo, sino para volverse más fuerte.
A lo largo de su existencia, se ha sentido amenazado en varias ocasiones: la primera, la podríamos situar con el nacimiento del marxismo; la segunda, mucho más liviana y humana, es la aparecida en el mayo del 68; la última y todavía renqueante, es el nacimiento del fenómeno de la antiglobalización, cuya primera muestra fue Seattle y Bolonia.
Últimamente ha llegado a tal perfeccionamiento en su defensa que ha provocado que la juventud, sector de la población que está más proclive a cuestionar el status-quo de su entorno, haya desaparecido. Ya nadie es joven, se pasa directamente de la etapa infantil y adolescente -13, 14, 15 años- a la etapa adulta -30 y tantos-. Se les ha ralentizado y prorrogado la adolescencia. El sistema defensivo ha canalizado el auge incontrolado hormonal de una forma bastante curiosa: la juventud sigue utilizando juegos infantiles y pre-adolescentes hasta bien entrada la treintena. Es corriente conocer a veinteañeros disfrutando todavía de consolas de videojuegos, patines, monopatines, bicicletas, etc. Los más “cuestionadores” del sistema, la vanguardia de ese lógico malestar, proclives a este cuestionamiento de una forma agresiva con su arte (música, pintura, poesía, etc.), son deglutidos por el sistema y terminan integrados en la “multinacional del graffiti” o emulando el conformismo y la marginación de la población afroamericana de las grandes urbes de Estados Unidos con su música, ademanes, vestuario, etc.
Esa ralentización y prorrogación de la adolescencia también afecta a la sexualidad. El veinteañero vive en casa de los padres y no dispone de medios suficientes para vivir sólo, incluso aunque tenga un salario propio. Prefiere convivir con sus progenitores porque es dificultosa su emancipación, debido al bajo salario que recibe, teniendo la misma calidad de vida que veía disfrutando. Está dispuesto a pagar el precio de un casi celibato o espaciar la frecuencia sexual, por la comodidad de vivir en casa de sus padres soportando los brotes del abismo generacional-paternal.
La diferencia de maduración entre sexos (las niñas maduran antes) que se veía en los adolescentes nacidos en los años 50-60 e, incluso, en los 70, se ha agrandado entre los nacidos en años posteriores.
Nunca el sistema actual ha estado tan seguro.
ETA Y EL OTRO PLATO DE LA BALANZA
Una de los puntos que más me ha llamado la atención sobre esta diferenciación, es la falta de un grupo armado en el otro presumible bando que equilibre las acciones armadas de ETA.
La "acción-reacción-acción" es directa entre el brazo militar de la izquierda nacionalista y las Fuerzas de Seguridad del Estado, incluida la Ertzantzia, no existiendo un grupo armado al otro lado que, tal como pasa en Irlanda entre el IRA católico y los diferentes grupos armados protestantes, equilibre con sangre y muertos la balanza.
Los objetivos etarras no han sido sólo policías y militares, sino que también ha habido entre ellos miembros de la sociedad civil, como han sido periodistas y políticos y, cuando las acciones armadas han sido indiscriminadas, tal como fueron las que se produjeron por el sistema del llamado coche-bomba, lo han padecido incluso gente que no tenía nada que ver con los objetivos de esa lucha. Habría que recordar que no sólo ha habido victimas menores de edad implicados en el victimario del grupo armado de la izquierda nacionalista, como han sido familiares de miembros de las fuerzas de seguridad sino que ha habído victimas colaterales que no tenían ningún tipo de relación, ni indirectamente, con los objetivos del grupo armado.
Muchas veces me pregunté por qué algún sector violento de la población o algún familiar directo o indirecto de alguna de las victimas de ETA no se ha tomado la justicia por su mano y ha cometido, también, un atentado indiscriminado contra el mundo del MLNV. ¿Ha sido por miedo, por desidia, por falta de concepción de sacrificio, por falta de medios tal vez…, ?
Todos los atentados directos contra el mundo del MLNV, ya fuera a través de grupos tan diversos como ATE, BVE, GAL o algún otro que no recuerdo, fueron perpetrados por miembros de las FSE o a través de mercenarios contratados en el extranjero y, ambos grupos, financiados por los propios organismos públicos estatales o a través de empresarios acosados por el llamado "impuesto revolucionario". No ha habido ningún familiar de victima del terrorismo, ni ningún grupo formado "espontáneamente" que, en represalia para defenderse o responder a esa violencia, aplicara la máxima del "ojo por ojo".
A pesar de que ETA también ha atentado contra miembros y sedes de grupos políticos de la izquierda (comunistas y socialistas), en estos partidos tampoco se ha dado hasta la fecha ningún debate interno que abogara por devolver los golpes al grupo etarra o defenderse directamente de ellos. Sí que ha ocurrido que, algunos miembros de esos partidos, cuando han sido gobierno o han tenido tareas de responsabilidad policial, han actuado fuera de la ley y de las órdenes expresas del Gobierno de turno para, presumiblemente, "equilibrar la balanza". Quizás algunas de estas acciones si tuvieran, aunque fuera de forma tácita, el beneplácito de altos cargos del Gobierno, tal como fue el intento de secuestro de un alto jefe de ETA para intercambiarlo por el capitán de farmacia Martín Barrios o el senador socialista Enrique Casas, secuestrados por el grupo armado vasco, pero fueron unas acciones aisladas, no dentro de una estrategía.
No hace muchos años, en una charla con un amigo argentino sobre este tema, me insinuó que esta falta de "replica", había sido debido a que la sociedad española todavía vive en el miedo que se incautó de la población una vez terminada la guerra civil. También teorizaba que esto, es decir, el sufrir el silencio y comprensión victimista los atentados o saberse objetivo de este grupo armado y no contrarrestarlos con violencia, no se hubiera producido si en España, la gente que luchó en la guerra civil no hubiera muerto en ella o que tuviera, actualmente, más de 90 años. Me ponía los numerosos ejemplos que había habído entre sectores ideológicos enfrentados antes de 1.936
Esta reflexión me ha llevado a pensar en las palabras de este amigo.
Muchas veces se ha hablado que en el País Vasco existe un CONFLICTO, pero si lo analizas en profundidad e intentas ubicar una premisa, el silogismo no se cierra. El conflicto no existe ya que para que haya un conflicto debe haber dos partes. En un conflicto deben existir 2 partes enfrentadas. En este caso se ve que una parte A puede liquidar a B, pero B no hace nada, es decir, un militante de ETA puede matar a un concejal socialista o popular y no hay ningún grupo armado que se enmarque en la órbita de estos dos grupos políticos, es decir, socialista o popular, que devuelva el golpe, no existe la acción-reacción-acción. Es la policía, tanto autonómica como estatal, las que actuan sobre este grupo, y las que, ahora sí, desencadenan la acción-reacción-acción.
Esto también me ha hecho recordar que, cuando tenía apenas unos 10 años, paseando con mi abuela, me señaló a un policía armado con su enorme abrigo gris y que vivía por nuestro barrio. Me comentó que ese policía había sido uno de los peores torturadores que había habido en nuestra ciudad una vez acabada la guerra civil y que había matado a varios hombres que ella denominaba "de ideas". Yo le pregunté por la razón del porqué nadie lo había matado, algún familiar de los asesinado o alguno de los torturados una vez hubiera salido de la comisaría o de la cárcel. Me contestó que era por miedo. Elucubré que hubiera sido fácil acabar con él ya que hacía el mismo camino todos los días y que solamente se hubiera necesitado un palo o un cuchillo. Ella, estupefacta, no supo decirme nada más, creo que solo me dijo que "la gente no quiere problemas y prefieren olvidarse".
Uno está dispuesto a morir, pero no a matar; uno está dispuesto a matar, pero no a morir. En esto se resume, el síndrome del siervo o de la victima, como también el síndrome del amo/verdugo, que explica tanto lo que sucede en el País Vasco, como en el policía torturador, del que me hablaba mi abuela.
Siervos/victimas/esclavos/mártires": Su objetivo, sin saberlo, es vivir con miedo.
Puede resultar extraño que, sabiendo que puedes ser objetivo de un grupo armado, como es el caso de los políticos en el País Vasco, te presentes a elecciones locales, autonómicas y generales. Puedes recibir el "castigo" y no te sientes con fuerza moral suficiente para alzar la voz ya que el "castigo" puede todavía ser peor. Vives en la idea que "el señor" igual hasta tiene algo de razón.
Amos/verdugos: Su objetivo es vivir aplicando el miedo, el miedo es, con el sexo, el factor más importante que actúa sobre el ser humano. Tienes que tener "al otro" atemorizado o que sepa que tú no vives con miedo. Eso ya es suficiente.
Ejemplos hay muchísimos sobre estos dos síndromes:
-Las contra-manifestación siempre son del lado de amo. El siervo no tiene la carencia del miedo suficiente para poder ser él también amo y convocarlas.
-En muchos pueblos del País Vasco, en elecciones locales, no aparece ni un solo voto a candidaturas que no sean nacionalistas. Es imposible que no haya la más mínima muestra de oposición.
-Familiares de verdugos se trasladan a Madrid y se manifiestan delante de la Audiencia Nacional sabiendo que nadie, ni familiares de las victimas de sus familiares, valga la redundancia, van a coartar su derecho de manifestación.
-Dirigentes y cargos electos socialistas y populares del País Vasco, viven con escolta. Nadie sabe de ningún cargo ni dirigente nacionalista, ya no digamos de la denominada "izquierda abertzale" que paseé con ella.
Quizás habría que hacer la salvedad del atentado perpetrado contra Fermín Muruguza, Esnaola e Idígoras, en que murió el primero. Su "síndrome del amo" les llevaba a cenar tranquilamente en un restaurante vasco enfrente del Congreso de los Diputados sin pensar que podrían ser victimas de algún grupo armado. Este atentado si que fue perpetrado por un grupo formado, al menos puntualmente, para atentar contra gente del llamado MLNV. De los dos autores del atentado, uno de ellos fue detenido y encarcelado (un miembro de la Policía Nacional), el otro miembro nunca fue identificado aunque fue detenido Ynestrillas como posible autor, pero fue puesto en libertad por falta de pruebas.
Algo debe pasar en el País Vasco cuando puedes pasear por las calles con una camiseta con el lema "Gora ETA" y no poder hacerlo, NI SIQUIERA PENSARLO, con un lema del tipo I love Spain o similar.
En definitiva, ¿por qué Savater no puede pasear con tranquilidad por su ciudad, San Sebastián, con mayoría de habitantes que vota a partidos constitucionalistas, y, en cambio, Otegi si puede hacerlo?
Algo funciona mal en todo esto, pero es clara la atmósfera de miedo, de esclavitud, que existe.