Yo, café; yo, también.

...Estado, Comunidad Autónoma, Diputación, Ayuntamiento, Delegación del Gobierno Central, Delegación del Gobierno Autonómico, Consejos Comarcales...
Antes de la muerte del Caudillo -es curioso que se hubiera utilizado ese apelativo para denominar a Franco- solamente tres regiones españolas reclamaban, con mayor o menor fuerza, un papel más autogestionario dentro del país: Cataluña, Vascongadas y Galicia. Quizás a estas tres habría que sumarle Las Islas Canarias.
Con la llegada de la Transición, dos de estas regiones (Cataluña y Vascongadas) se posicionaron en lo más alto y reivindicaron unos estatutos de autonomía, que muy bien no se sabía lo que eran: ¿estatuto de autonomía era igual a independencia, a federalismo, a confederación? ¿autogobierno era autogobierno total, parcial...? Nadie lo tenía claro.
A pesar de todos los cambios que de aquella se estaban produciendo y de las presiones que estas dos regiones ejercían para alcanzar un rol de autogobierno, nadie se asustaba, ya que, a pesar de la poca cultura general y, sobre todo, política que había, sabíamos que, aunque se les concediera ese autogobierno que reclamaban, ninguna de ellas llegaría a separarse totalmente de España. Veíamos en las películas americanas que USA estaba formada por Estados casi independientes y que cada uno de sus territorios tenía su propia policía, parlamento, leyes (no podemos olvidarnos de los pistoleros que eran perseguidos en Texas pero no en Kansas o Oklahoma). Muchos hasta veíamos bien que estas dos regiones españolas tuvieran un papel diferenciado dentro del Estado.
Pero ahí empezó el problema. Políticos de todos los lugares e ideologías se empezaron a colocar al frente de sus territorios reivindicando que, si Cataluña y el País Vasco iban a tener un estatuto diferente dentro del Estado, ellos también lo querían para el suyo. Los propios políticos de esas dos regiones -vascos y catalanes- también entran en lid reivindicando no sólo su diferenciación, sino que quieren que el resto de las regiones sean igual entre sí, pero nunca como ellos.
Se plantean Comunidades Autónomas de lo más variopinto:
-Comunidad Autónoma de La Rioja. Ya no es Logrono ni pertenece a Castilla la Vieja, sino que es una región administrativamente autónoma basada en una denominación de origen vinícola. No podemos olvidar que no es toda la denominación de origen ya que, también, dentro de esa denominación, está la Rioja alavesa y la navarra. Habitantes unos 300.000.
-Comunidad Autónoma de la Región de Murcia. Ya no es una región a la que se suma Albacete, sino que se construye una región autónoma uniprovincial apelando a (¿derechos históricos?) ya que, hace cinco siglos, había sido un reino independiente ¡musulmán!. Tiene menos de un millón y medio millón de habitantes.
-Comunidad Autónoma de Cantabría. Santander ahora es Cantabria y apela a sus reyes cántabros (¿también derechos históricos?) para formar otra comunidad autónoma uniprovincial. Otro medio millón de habitantes aproximadamente.
-Comunidad Autónoma de Madrid. Ya no le vale que tenga todo los ministerios, demás organismos estatales y esté agraciada económicamente por ello (50% del IRPF, IVA, Impuesto de Sucesiones, Transmisiones, etc, etc, para las arcas comunitarias), sino que también se crean más puestos de funcionarios autonómicos.
-Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha. Castilla la Nueva desaparece y se forma esta comunidad autónoma con restos de la antigua región y nuevas incorporaciones (Albacete).
-Comunidad Autonómica de Andalucía. Sin ningún tipo de reclamación histórica ni ansias de autogobierno, esta región se declara Comunidad Autónoma. Quiere tener las mismas competencias que el País Vasco y Cataluña.
-Comunidad Autónoma de Galicia. A pesar de que antes de la Guerra Civil llegó a plebiscitar su Estatuto de Autonomía y de ahí, su calificación de Comunidad Autonómica Histórica en la Constitución Española del 78, la mayoría de la población y políticos no están por la labor de tener un papel diferenciador con el resto de España.
Podemos seguir así y enumerar las otras regiones y ver que casi se les obligó a constituirse en Comunidades Autónomas, comprobando que la mayoría de ellas se hicieron por egoismo y/o complejos de sus políticos ante las dos únicas regiones españoles que si estaban verdaderamente interesadas en tener un "status quo" diferente (Pais Vasco y Cataluña). No puedo olvidar el caso esperpéntico de Segovia. Políticos de la extinta UCD, no se sabe a que apelaron para que esta provincia castellana fuera declarada Comunidad Autonómica. Al final, no lo lograron. Sólo decir que Segovia tiene unos 50.000 habitantes.
Las tensiones entre el poder central y las autonomías con gobiernos nacionalistas-soberanistas vascos y catalanes llevan a no suprimir cargos que no se sabe cual es su función (diputaciones) o a tener otros (delegaciones del gobierno central, los antiguos Gobiernos Civiles).
Esperemos que en el futuro y cuando vuelva la sensatez, si es que alguna vez la hubo y, en el caso de que Cataluña y Euskadi no lleguen a alcanzar su plena soberanía, en España se tendrán que constituir tres regiones federadas: Castilla, Cataluña y País Vasco, la primera, obviamente, producto de las reivindicaciones de las dos últimas.

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